Ingredientes
500 gramos de garbanzos cocidos (podemos usar los que venden en bote ya cocidos o bien cocerlos nosotros mismos sin sal).
2 tazas de chocolate negro para fundir, sin azúcar ni lactosa, o bien la cantidad proporcional de cacao puro en polvo.
4 huevos.
2 cucharadas soperas de estevia líquida (sin sabor, de color transparente) o bien 100 gramos de miel de abeja o sirope de agave.
Media cucharadita de levadura en polvo.
2 puñados de nueces peladas y troceadas.
Opcional: canela, cardamomo, jengibre, esencia de vainilla.
Elaboración
La elaboración es facilísima y muy rápida. Deberás seguir los siguientes pasos:
Precalentar el horno a 180º C.
En el caso de que usemos chocolate para fundir, lo iremos calentando al baño María.
Batiremos los huevos y después añadiremos los garbanzos. Deberemos batirlo todo bien hasta que quede una textura fina. Si tenemos una batidora de vaso o robot de cocina será mucho más rápido.
Añadiremos el endulzante que hayamos elegido y la levadura en polvo.
Finalmente añadiremos el chocolate fundido o el cacao y las nueces troceadas.
Opcionalmente podemos añadirle algunas especias para disimular todavía más el sabor a garbanzo, que ya va a desaparecer gracias al chocolate, o bien para darle toques de sabor diferentes cada vez que lo preparemos: canela, cardamomo, jengibre, esencia de vainilla, ralladura de naranja, etc.
Prepararemos un molde. Lo untaremos con aceite y lo enharinaremos.
Lo meteremos al horno y lo dejaremos 40 minutos a 180º C. Después lo sacaremos del horno y lo dejaremos enfriar encima de una rejilla.